MIRADA SORELA

Reflejar o buscar

Apartado: Sastrería

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Kafka, el ejemplo mismo de «buscador». Dibujo p.S

Sastrería 

Un escritor puede tomar fotos o dibujar, es decir interpretar. La foto sólo reflejará lo que hay, nada más, y por mucho que se empeñe será difícil que él salga de algún modo en el retrato. Se habrá convertido en el disparador de su cámara o el cable de su micrófono. En tanto que si dibuja, el resultado podrá ser más o menos discutible pero inevitablemente saldrá él.

La pregunta es: ¿Para qué tomar fotos de lo que ya existe? ¿Para qué añadir espejos? Puestos a añadir, ¿no es mejor añadir algo que no exista y que –ojalá, ese es el ideal- es único porque corresponde a su mirada y sólo a la suya?

Urge aclarar que cuando hablo de tomar fotos no estoy hablando de novela realista, arte hiperrealista, ni etiquetas parecidas de las que le hacen la vida más fácil a profesores, periodistas y críticos. Cuando digo tomar fotos me refiero a la clonación del sonido ambiente. Y la expresión sonido ambiente podría leerse de muchas formas, pero es, sobre todo, no una imagen ni un ruido sino un modo de pensar. Mejor aún, de ver.

Me parece que fue Klee quien dijo «quisiera trazar una línea, sólo una línea, pero que de no haber nacido yo no se hubiese podido trazar nunca». Tal vez no sea posible cumplir esa ambición pues nunca sabremos si otro hubiese podido nacer en nuestro lugar para escribir nuestros libros. Aunque yo no lo creo, hay quien dice que Marlowe habría sido un Shakespeare más grande de no haber muerto muy joven en una pelea de taberna, cuando se clavó su propio cuchillo en un ojo. O más conmovedoramente aún, que Shakespeare eran varios pues no es posible tanto talento en una sola persona. Pequeñas teorías de reportaje de domingo para un tiempo que esperemos no sea tan decadente como parece. En cualquier caso, sólo con su frase a Klee ya se le podría reconocer como artista, pues quizá esa sea su condición misma: la ambición más enloquecida. La búsqueda de una línea única y necesariamente suya.

Sin ir tan lejos, o yendo a lo práctico, reflejar o buscar es exactamente lo que diferencia lo que llamo Periodismo Lluvia (hoy mayoritario, el de las ruedas de prensa e incluso sin preguntas (¡!), los premios pactados, las películas industriales, los rituales colectivos anuales, etc.), es decir, el periodismo que se limita a recoger lo que le cae encima, de lo que podríamos llamar Periodismo Minero, que es el que busca para destapar lo no evidente. O sea, Periodismo.

Una de las preguntas de nuestro tiempo -de cualquier tiempo en realidad- es a cuántos les está reservado, no ya resolver el desafío, sino tan siquiera planteárselo. En el tiempo de las industrias culturales, a cuántos tan siquiera se les puede ocurrir. A unos y a otros les separa la misma diferencia que existe entre reflejar y buscar.