Efectos de la lluvia en Portugal
En: Historia de las despedidas, 2008
Sirve de brújula, de mapa: esa lluvia de aire sólo puede ser Portugal.
Esconde los teléfonos móviles bajo los paraguas y hace a sus propietarios más inteligentes
Ennoblece las piedras y las condecora con verdín
Destiñe los amarillos en ocre nostalgia
Enloquece a las golondrinas de pura alegría
Baja las voces
Tersa y rejuvenece las mejillas de las jóvenes en el momento del beso
Resucita los estanques
Compone música con la arena de los parques al ser pisada. Música para suela y arena
Convierte en soles las naranjas del claustro de la catedral de Évora
Se pueden leer libros en los ojos que miran por las ventanas
Devuelve el azul a los verdes
Su gris, y sólo ahí, su gris inspira buenas novelas
A los españoles les da ganas de aprender portugués (los portugueses saben español desde niños)
A caballo de ella, el aire transporta los fados a largas distancias
Algunos banqueros recuerdan, a veces, versos del colegio
Puede perfectamente ocurrir que un transeúnte dicte canciones
Anuncia la saudade: llega cuando la lluvia se va
Amansa a los geómetras.